Debido a la complejidad derivada de los modelos de negocio de las sociedades dedicadas al vino, así como su importancia en España, surge el Plan General de Contabilidad al sector vitivinícola, cuyas normas de adaptación se aprobaron mediante la “Orden del 11 de mayo de 2001 (BOE 129/2001, de 30 de mayo)”.
Procesos productivos del sector vitivinícola
Dicha orden considera que “para aquellas empresas que realicen la actividad del sector vitivinícola, conjuntamente con otra u otras actividades ordinarias, se aplicarán las normas de adaptación correspondientes a cada actividad”.
Cabe destacar que, si bien existe un PGC posterior, las adaptaciones sectoriales se seguirán aplicando en todo lo que no se oponga con Código de Comercio o nuevo PGC.
Para entender la forma de registrar contablemente las operaciones es preciso conocer cuál es el proceso productivo de las empresas del sector. Cabría destacar los siguientes ciclos productivos:
Proceso para la obtención de la uva
- Cultivo de la vid: engloba la plantación de las cepas, abonados del terreno, así como los procesos necesarios para la maduración de la uva en la cepa.
- Vendimia: se trata del proceso de recolección de los racimos de uva de las cepas cuando ha llegado el momento de la maduración. Suele tener lugar entre agosto y octubre dependiendo de la situación del terreno.
Proceso seguido para la producción de vino
- Despalillado: proceso de limpieza de las uvas de hojas y ramas.
- Estrujado: obtención de una mezcla llamada mosto formado por la piel de la uva y su pulpa.
- Maceración: reposo del mosto para que se produzca la fermentación alcohólica.
- Descube: el líquido continúa con la fermentación alcohólica en otro depósito.
- Prensado: prensado de la parte sólida del mosto. El resultado da lugar a orujos, que puede ser un subproducto.
- Fermentación maloláctica: transformación del ácido málico en ácido láctico.
- Crianza: reposo del vino en barricas de madera.
- Embotellado: el vino es trasladado a las botellas de cristal y se añadiría el corcho y la etiqueta. Si el vino es joven, el proceso terminaría con la venta.
- Envejecimiento de aquellos vinos no jóvenes: cuando el vino no es joven, el vino se mantendría reposando en botellas hasta que esté listo para su venta.
Una vez definido el proceso de obtención de uva y de producción de vino, es importante conocer cuáles son los puntos críticos sobre el registro contable del proceso productivo.
Puntos clave en contabilidad
Registro contable de las cepas
Será de aplicación cuando la empresa posea viñedos o derechos de explotación de los mismos.
Desde que se planta la cepa hasta que comienza a dar producción de uvas, pasan aproximadamente tres años. La edad de máxima producción de uvas es de entre 10 a 30 años, edad a la cual la cepa comenzará a bajar la producción de uvas.
De acuerdo con la consulta del ICAC Número BOICAC 97/MARZO 2014-6:
“Su valoración comprenderá el precio de adquisición o coste de producción de los elementos necesarios para poner en condiciones de explotación agrícola un terreno, propiedad de la empresa, destinado a dicho fin; se pueden citar entre otros, las cepas, pies, injertos, postes y alambrado para el emparrado de la vid, etc. y los elementos que estén íntimamente ligados a la plantación y que tengan carácter de permanencia. Los gastos devengados con anterioridad a la primera cosecha productiva, es decir, desde que la plantación está en condiciones de producir ingresos con regularidad, se incorporarán como mayor valor de la plantación, incluyendo, en su caso, los gastos financieros inherentes, sin que en ningún caso pueda exceder del precio de mercado. (…). Asimismo, todos los gastos directos producidos con anterioridad a que la plantación esté en condiciones de producir ingresos con regularidad se incorporarán como mayor valor de la plantación, comenzando a amortizarse cuando esté en condiciones de explotación.”
Por lo tanto, desde que se planten las cepas hasta que comiencen a generar producción, éstas se deberán contabilizar como inmovilizado material en curso y posteriormente en inmovilizado material, amortizándose en función de su vida útil.
Registro contable de las barricas de madera
Las barricas de madera, puesto que es un elemento necesario para el proceso productivo se deberían registrar como inmovilizado material y amortizarse en función de su vida útil.
Cálculo del coste de producción
Para calcular el coste de producción de la uva se deberá imputar todos los costes incurridos para su obtención como pueden ser los costes de vendimia, recolección y transporte, así como la amortización de las cepas.
Para calcular el coste de producción del vino se deberán imputar todos los costes directos e indirectos incurridos en el proceso productivo tales como:
- Materias primas: uva
- Otros aprovisionamientos: botellas, corchos, etiquetas
- Mano de obra directa
- Costes indirectos: la amortización de las máquinas y barricas de madera, mano de obra indirecta, etc.
Valoración de existencias
Para la valoración de las existencias se recomienda que la empresa elabore un escandallo para poder controlar los costes imputados. De acuerdo con la tipología de empresa y la actividad desarrollada distinguimos entre:
- Empresas distribuidoras de vino: estas empresas son las que no producen vino, sino que solamente distribuyen botellas de vino, por lo que las existencias que deberán registrar son:
- Existencias comerciales: botellas de vino valoradas a precio de adquisición.
- Empresas productoras de vino. Son empresas que producen y venden vino, por lo que las existencias a registrar son:
- Materias Primas: uvas necesarias para la producción de vino. Si la empresa las compra a un tercero, se valorarán a precio de adquisición mientras que, si las recoge de su viñedo, se valoran a coste de producción.
- Otros aprovisionamientos: botellas vacías, corchos y etiquetas que se valoran a precio de adquisición
- Existencias en curso: existencias que aún no han finalizado su proceso productivo. Se valoran a coste de producción
- Producto terminado: botellas de vino que están preparadas para su venta. Se valoran a coste de producción.
Teniendo en cuenta la actividad vitivinícola, cabe destacar que, en base a la adaptación al PGC, las existencias en balance se pueden clasificar como:
- A. Productos de crianza de ciclo corto.
- B. Productos en proceso de crianza de ciclo largo.
Puesto que la valoración del vino es un proceso contable complejo, es importante que las empresas del sector planifiquen una estrategia definida y de procesos destinada a la elaboración de un escandallo y a la posterior contabilización de la valoración de existencias para que en los estados financieros se muestre la imagen fiel de las existencias.