Los estados financieros son informes en los que se plasma la situación financiera de un negocio y recoge información, tanto económica como patrimonial, de las empresas, siendo importantes para conocer la rentabilidad y solvencia de una sociedad.
Toda esta información se presenta en las cuentas anuales o estados contables y permiten, tanto al Consejo de Administración como a inversores interesados conocer la solvencia y la rentabilidad del negocio.
Qué son los estados financieros
Los estados financieros reflejan la imagen fiel de una empresa y muestran la estructura económica de esta. En ellos se incluye el análisis de riesgo financiero y todas las actividades económicas, que han sido realizadas en un periodo determinado de tiempo.
Dicho de otra manera, estos informes muestran el ejercicio económico de la empresa en un tiempo. Son muy útiles para los inversores, puesto que con ellos pueden sopesar si la empresa tiene una estructura solvente o no.
Cuáles son los principales informes/documentos
Existen cuatro estados que toda consultoría financiera pone en relevancia en los análisis de riesgo financiero. Los administradores de las empresas deben tenerlos siempre presentes, ya que estos datos van a tener mucha relevancia a la hora de tomar decisiones importantes. La contabilidad de la empresa es la encargada de recoger la información para poder hacer los informes.
Además, los estados financieros también son utilizados por las entidades de crédito para conocer el estado de la empresa en esa área. Con ellos pueden saber si es rentable o no, los límites y la cantidad de dinero que pueden prestarles y los riesgos que asumen.
Otras personas a las que interesan estos datos son los accionistas de la empresa. Gracias a ellos, pueden saber si están ganando dinero con ella o si deben evitar invertir sus ahorros en esa organización.
Los informes que presentan la imagen fiel de una empresa son los siguientes:
Balance general o de situación
El balance general va a ofrecer información detallada sobre activos, pasivos y el patrimonio de una empresa. Analizándolo, se consigue conocer la situación financiera de la empresa en un momento concreto. En él, se muestra qué debe, qué posee y qué se ha invertido en el negocio. Se divide en:
- Activos. Los bienes con valor que tiene una empresa.
- Pasivos. La cantidad de dinero que una empresa debe a terceros.
- Patrimonio. Es el dinero que le quedaría a la empresa si pagara todo el pasivo y vendiera todos sus activos.
Cuenta de resultados
En la cuenta de resultados aparecen los ingresos que la empresa obtuvo durante un tiempo, que suele ser un año o unos meses determinados. Se muestran tanto costes como gastos que se asocian a la obtención de ingresos. El objetivo es conocer las ganancias o las pérdidas netas de la compañía. En consecuencia, con él se sabe cuánto ganó o perdió en un tiempo.
Estas declaraciones de ingresos también son importantes para los accionistas. Señalan cuántos ingresos recibirán en caso de que la empresa decidiera repartir las ganancias netas en un periodo.
Por un lado, se muestra el beneficio obtenido por la venta de productos o servicios (los ingresos brutos o ventas). También se indica el beneficio que la compañía no espera cobrar en ciertas ventas a causa de descuentos o devoluciones de mercancías, entre otros.
Por tanto, dentro del estado de resultados aparecen:
- Los ingresos netos. Es decir, el dinero que se gana en la empresa.
- Gastos operativos. Lo que cuesta mantener la empresa.
Estado de flujo de efectivo
Como su propio nombre indica, el estado de flujo de efectivo señala la entrada y salida de dinero de la empresa. Es una información importante, ya que los negocios precisan tener efectivo suficiente y disponible para hacer frente a sus gastos y comprar activos. Mientras que en el estado de resultados muestra si la empresa obtuvo ganancias, en este flujo de efectivo se explica si generó dinero líquido.
Es más, el hecho de que una sociedad obtenga un beneficio en su cuenta de resultados, no quiere decir que tenga liquidez para hacer frente a los gastos y deudas que tenga. De ahí la importancia del Estado de Flujos de Efectivo, donde se observa no tanto la rentabilidad (que también es importante) sino la corriente monetaria para hacer frente a los pagos a realizar con los ingresos recibidos.
Aparecen en este informe los cambios que suceden en el tiempo, en vez de los importes absolutos en un momento determinado. Gracias a esto, el estado de flujo de efectivo permite reutilizar y volver a ordenar la información que se había obtenido en el balance de la empresa y el estado de resultados.
Los estados de flujo de efectivo se dividen habitualmente en tres grandes partes:
- Operativas
- De inversión
- De financiación
Estado de cambios en el patrimonio neto
Las empresas que cotizan en Bolsa utilizan de manera habitual el estado de cambios en el patrimonio neto. Esto es debido a que si la empresa aumenta su número de accionistas, su patrimonio neto puede variar, modificando los dividendos que paga y el valor de sus acciones.
Memoria
La memoria es la explicación de cada una de las partidas significativas del balance, cuenta de resultados o estado de flujos de efectivo. En la memoria se realizan las explicaciones oportunas a los movimientos acaecidos en la sociedad y que tengan repercusión en los estados financieros y clarifican a un usuario externo determinados asuntos que con la lectura del balance o cuenta de resultados no sería suficiente
Cómo utilizarlos en la toma de decisiones
Los estados financieros muestran la información contable de la empresa, agrupándola en un periodo de tiempo determinado. Así, los responsables pueden saber el valor de los activos totales, las deudas que vencen y cuándo y otros datos de interés. Por tanto, imprescindibles en el asesoramiento financiero.
Es preciso señalar que toda esta información es pública. Tanto autónomos de responsabilidad limitada como sociedades mercantiles, tienen la obligación de presentar los estados en el Registro Mercantil tras el cierre del ejercicio contable.
Por tanto, es muy útil para:
- Poder conocer la evolución de la empresa y compararla con la de otros periodos.
- Conocer la solvencia de una sociedad
- Los potenciales inversores pueden valorar el riesgo de una potencial inversión en la sociedad. También es importante para las entidades financieras por el mismo motivo.
- Las administraciones públicas solicitan estos estados para calcular el pago de impuestos que corresponde a la compañía.
Pero, sin duda, los estados financieros son muy importantes para los equipos directivos y los accionistas. Toda la información recogida en ellos, les va a permitir tomar decisiones ágiles y acertadas. Por tanto, aunque se considere que este es un trabajo que no merece la pena, desde Atisa recomendamos realizarlo de manera optimizada. La información es tan útil que el tiempo invertido en ellos, será muy provechoso para el buen funcionamiento de la compañía y la consecución de los objetivos.